Entre un 16 a un 33 por ciento de los niños y adolescentes son obesos. La obesidad es una de las condiciones médicas más fáciles de reconocer, pero cuyo tratamiento es muy difícil. Los niños con sobrepeso tienden a convertirse en adultos con sobrepeso, a menos que adopten y mantengan unos patrones más saludables de comer y hacer ejercicio.
Unos kilos extra no implican obesidad. Sin embargo, ello puede indicar una tendencia a ganar de peso con facilidad y la necesidad de cambios en la dieta y/o ejercicio. Generalmente un niño no se considera obeso hasta que pesa por lo menos un 10 por ciento más que el peso recomendado para su estatura y tipo de cuerpo. La obesidad comúnmente comienza en la infancia entre las edades de 5 a 6 años y durante la adolescencia. Los estudios han demostrado que el niño que es obeso entre las edades de 10 a 13 años tiene un 80 por ciento de probabilidad de convertirse en un adulto obeso.
TAREA:
Calcular el indice de masa corporal de los alumnos de clase
PROCESO:
Calcular el indice de masa corporal es sencillo. Y la Tabla nos permite conocer lo que debemos hacer para corregir nuestro problema derivado de nuestro peso en relacion a nuestra estatura.Basta con dividir nuestro PESO en Kilos entre nuestra TALLA en metros al cuadrado.
PESO (Kg) : TALLA (m)al cuadrado = I.M.C.
RECURSOS:
EVALUACION:
En ella se tendrá en cuenta :
La participación por igual de todos los miembros del grupo.
La corrección técnica de las páginas web realizadas.
La corrección estética de las páginas web realizadas.
...y por supuesto, EL ESFUERZO Y LA ILUSIÓN EMPLEADAS.
La participación por igual de todos los miembros del grupo.
La corrección técnica de las páginas web realizadas.
La corrección estética de las páginas web realizadas.
...y por supuesto, EL ESFUERZO Y LA ILUSIÓN EMPLEADAS.
CONCLUSION:
Formas de manejar la obesidad en niños y adolescentes:
comenzar un programa de control del peso
cambiar los hábitos de comer (comer despacio, desarrollar una rutina)
planificar las comidas y hacer una mejor selección de los alimentos (comer menos alimentos grasos y evitar los alimentos de poco valor nutritivo)
controlar las porciones y consumir menos calorías
aumentar la actividad física (especialmente el caminar) y tener un patrón de vida más activo
enterarse de lo que su niño come en la escuela
hacer la comidas en familia en vez de estar viendo la televisión o estar en la computadora
no utilizar los alimentos como premio
limitar las meriendas
asistir a un grupo de apoyo
La obesidad con frecuencia se convierte en una cuestión para toda la vida. La razón por la cual la mayoría de los adolescentes ganan las libras que han perdido es que al alcanzar su meta, ellos regresan a sus hábitos viejos de comer y ejercitarse. Un adolescente obeso por lo tanto tiene que aprender a comer y a disfrutar de los alimentos saludables en cantidad moderada y ejercitarse regularmente para mantener el peso deseado. Los padres de un niño obeso pueden mejorar la autoestima de su hijo enfatizando sus puntos fuertes y cualidades positivas en vez de enfocarse en el problema del peso.
Cuando un niño o adolescente con obesidad también tiene problemas emocionales, el psiquiatra de niños y adolescentes puede trabajar con el médico de la familia del niño para desarrollar un plan de tratamiento comprensivo. Tal plan ha de incluir una metas de pérdida de peso, manejo de la actividad física y dieta, modificación del comportamiento y la participación de toda la familia.
comenzar un programa de control del peso
cambiar los hábitos de comer (comer despacio, desarrollar una rutina)
planificar las comidas y hacer una mejor selección de los alimentos (comer menos alimentos grasos y evitar los alimentos de poco valor nutritivo)
controlar las porciones y consumir menos calorías
aumentar la actividad física (especialmente el caminar) y tener un patrón de vida más activo
enterarse de lo que su niño come en la escuela
hacer la comidas en familia en vez de estar viendo la televisión o estar en la computadora
no utilizar los alimentos como premio
limitar las meriendas
asistir a un grupo de apoyo
La obesidad con frecuencia se convierte en una cuestión para toda la vida. La razón por la cual la mayoría de los adolescentes ganan las libras que han perdido es que al alcanzar su meta, ellos regresan a sus hábitos viejos de comer y ejercitarse. Un adolescente obeso por lo tanto tiene que aprender a comer y a disfrutar de los alimentos saludables en cantidad moderada y ejercitarse regularmente para mantener el peso deseado. Los padres de un niño obeso pueden mejorar la autoestima de su hijo enfatizando sus puntos fuertes y cualidades positivas en vez de enfocarse en el problema del peso.
Cuando un niño o adolescente con obesidad también tiene problemas emocionales, el psiquiatra de niños y adolescentes puede trabajar con el médico de la familia del niño para desarrollar un plan de tratamiento comprensivo. Tal plan ha de incluir una metas de pérdida de peso, manejo de la actividad física y dieta, modificación del comportamiento y la participación de toda la familia.